Addax (Addax nasomaculatus)
Gacela dama (Nanger dama)
Gacela de Cuvier (Gazella cuvieri)
Órix del Sahara (Oryx dammah)
Chacal del Sahara (Canis anthus saharae)
Gato de arena (Felis margarita)
Zorro del desierto o fénec (Vulpes zerda)
Avestruz del Sahara (Struthio camelus camelus)
Acacia raddiana
Panicum turgidum
Anastatica hierochuntica (Rosa de Jericó)
Balanites aegyptiaca (Dátil del desierto)
Zygophyllum album
Maerua crassifolia
Calotropis procera
Cymbopogon proximus (hierba aromática del desierto)
1. Factores Naturales
Tormentas de arena y vientos extremos
Vientos como el siroco o harmattan arrastran grandes cantidades de arena, erosionan el suelo y dificultan la supervivencia de la vegetación y fauna.
Sequías prolongadas
La escasez extrema de agua reduce la disponibilidad de recursos, limita el crecimiento de plantas y causa migración o muerte de animales.
Oscilaciones térmicas extremas
Las variaciones bruscas de temperatura entre el día y la noche afectan la salud y comportamiento de las especies del desierto.
Plagas y enfermedades naturales
Insectos y microorganismos pueden atacar a plantas resistentes del desierto, afectando la alimentación de herbívoros y rompiendo cadenas tróficas.
Competencia y depredación natural
En un entorno con pocos recursos, la competencia por alimento y agua es intensa, afectando a especies más vulnerables.
2. Factores Antrópicos (Humanos)
Explotación de recursos naturales:
La minería, la extracción de petróleo y gas dañan el suelo, contaminan acuíferos y fragmentan hábitats clave del ecosistema desértico.
Sobrepastoreo:
La ganadería extensiva agota la vegetación nativa, impide su regeneración y acelera la desertificación.
Caza furtiva:
Especies en peligro como el addax y la gacela dama son cazadas ilegalmente, disminuyendo aún más sus poblaciones.
Cambio climático inducido:
El aumento global de las temperaturas y la reducción de lluvias intensifican las condiciones extremas del Sahara.
Contaminación:
La basura plástica, derrames de petróleo y residuos químicos contaminan los oasis y zonas habitadas por flora y fauna.
Construcción de infraestructura:
Carreteras, oleoductos y asentamientos humanos fragmentan el ecosistema y bloquean rutas de migración animal.
Turismo no regulado:
Actividades turísticas como los recorridos en vehículos todoterreno dañan la frágil capa superficial del suelo y alteran el comportamiento animal.
Introducción de especies invasoras:
Plantas y animales no nativos alteran la competencia por recursos, afectando a las especies adaptadas al entorno sahariano.