Bilby mayor (Macrotis lagotis)
Peramelidae (bandicut)
Lagarto de lengua azul (Tiliqua adelaidensis)
Perico nocturno (Pezoporus occidentalis)
Ratoncito saltador del desierto (Notomys fuscus)
Dasycercus cristicauda (mulgara de cola crestada)
Zorro volador de cabeza gris (Pteropus poliocephalus)
Dragón de tierra de Australia Central (Ctenophorus fordi)
Acacia peuce (acacia del desierto)
Swainsona formosa (flor del desierto o Sturt’s desert pea)
Grevillea kennedyana
Eremophila gilesii
Solanum centrale (bush tomato)
Zygophyllum aurantiacum
Triodia basedowii (spinifex)
Senna artemisioides
1. Factores Naturales
Sequías prolongadas: reducen la disponibilidad de agua para flora y fauna.
Tormentas de arena y viento: erosionan el suelo y cubren vegetación emergente.
Incendios naturales: pueden eliminar especies que no toleran el fuego frecuente.
Poca regeneración natural: el crecimiento lento de plantas limita la recuperación tras perturbaciones.
2. Factores Antrópicos (Humanos)
Sobrepastoreo de ganado: impide la regeneración de plantas nativas y compacta el suelo.
Extracción minera: destruye hábitats y contamina acuíferos subterráneos.
Introducción de especies invasoras: como gatos, zorros, conejos y camellos salvajes que dañan flora y fauna nativa.
Cambio climático: intensifica las sequías, aumenta las temperaturas y altera los ciclos ecológicos.
Construcción de carreteras y cercas: interrumpe el movimiento de especies.
Turismo sin control: provoca erosión, residuos y perturbación del hábitat.
Caza furtiva: aunque menor en el desierto, afecta a algunas especies emblemáticas.
Contaminación del suelo: por residuos industriales y agrícolas.